Más de 8 millones y medio de euros es la multa que les han impuesto los magistrados de la Audiencia Nacional a 12 narcotraficantes (cuatro marroquís, un argelino, dos holandeses y cinco españoles) que fueron sorprendidos en enero del 2007 por miembros del Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (Edoa) de la Guardia Civil con 2.580 kilos de hachís distribuidos en 85 fardos y que descargaron con una lancha en una playa de Alcossebre.

En la sentencia, a la que ha tenido acceso Mediterráneo, los jueces tienen en cuenta la circunstancia de dilaciones indebidas, ya que la causa permaneció paralizada en el juzgado de Instrucción de Vinaròs desde el 5 de mayo del 2007 hasta el 13 de octubre del 2010. También consideran para todos ellos la circunstancia atenuante de confesión tardía, por lo que imponen para cada uno de los 12 acusados penas de un año de prisión.

Los hechos sucedieron durante los días 16 y 17 de enero del 2007, cuando los efectivos del Edoa de la Benemérita establecieron un dispositivo especial a lo largo de diferentes puntos del litoral de la provincia de Castellón, tras tener conocimiento, por investigaciones previas, del posible desembarco de droga en esta zona.

CAMINO RIBAMAR // Con numerosas patrullas desplegadas por los puntos sospechosos costeros, todas ellas camufladas de diferentes formas (con vehículos, a pie, realizando actividades deportivas), alrededor de las 23.00 horas del 16 de enero, los agentes de la Guardia Civil de Alcalà de Xivert localizaron a la altura del camino Ribamar una furgoneta Mercedes-Benz, pero sus ocupantes, al ver que les estaban siguiendo, se dieron a la fuga. En el interior del vehículo los especialistas hallaron 30 fardos numerados que contenían hachís en su interior.

Tras una batida por los alrededores, los agentes de la Benemérita lograron la incautación de otros 56 fardos más y, más tarde, otros cinco escondidos por el lugar. Ya sobre las 2.30 de la madrugada, los efectivos encontraron, tapados en una pinada próxima al mar, entre matorral bajo y maleza, en la playa conocida como Cubanita de Alcossebre, 55 paquetes más llenos de droga, de distintos tamaños y numerados.

Los miembros del Edoa entonces peinaron el lugar y, sobre esa misma hora, en el camino de salida a la zona del alijo, conocida como Serra d’Irta, dirección a Alcossebre, a la altura de la urbanización Cala Blanca, sorprendieron a tres de los acusados, que trataban de ocultarse entre el paisaje para conseguir escapar. El resto de implicados fueron detenidos poco después en distintos lugares de España. La droga tenía un valor de casi 4 millones. H