Un neonazi confesó ayer ante un jurado popular en la Audiencia de Barcelona haber matado a Anilo Viterbo, un hombre ecuatoriano homosexual con el que había concertado una cita en la localidad de Montgat (Barcelona) en el año 2000 y aceptó la pena de 15 años de cárcel.

Cristian A., de nacionalidad colombiana, admitió ser el autor de la muerte de Anilo Viterbo, cuyo cadáver apareció con 17 puñaladas, una margarita en la oreja y rodeado por las inscripciones «Hitler tenía razón» y «KKK», que había pintado en la pared con sangre de la víctima. «Sí, lo maté con un cuchillo a puñaladas», reconoció en el inicio del juicio.

Diecisiete años después del asesinato, el acusado fue detenido en Colombia, donde residía desde 2012, y fue extraditado un año después a España, donde había servido en el Ejército.