El Juzgado de lo Penal número 2 de Castellón ha absuelto a los propietarios de una vivienda de Orpesa, a los que el inquilino al que iban a echar por impago denunció por un supuesto robo. Los procesados acudieron a la casa, una vez hubo finalizado el contrato que mantenían con el denunciante, al que avisaron de que tenía que abandonar el domicilio y pagar todas las cuantías que no había abonado. Tras informar a la Guardia Civil y, acompañados por los agentes, se personaron en el inmueble, hallando allí a otras dos personas que decían haber, subarrendado, a su vez, el piso al que era el inquilino titular.

Los efectivos les dijeron que debían abandonar la casa y se procedió al cambio de la cerradura de la vivienda, que se encontraba en condiciones insalubres por suciedad y malos olores. Asimismo, fueron metiendo en bolsas lo que era susceptible de recoger y dejaron un aviso en la puerta de que dichos objetos podían pasar a recogerse por la oficina de la inmobiliaria encargada del piso.

DENUNCIA // Al día siguiente, se personó en dichas instalaciones el titular del contrato, acusando a las personas que intervinieron en el cambio de cerradura de haberle robado un reloj y 4.000 euros en efectivo que, supuestamente, tenía en el domicilio. Posteriormente, el susodicho se dirigió al cuartel de la Guardia Civil de Orpesa e interpuso una denuncia, acusando a los dueños de la vivienda de hurto y dos delitos de coacciones. Sin embargo, la magistrada del Juzgado de lo Penal 2 de Castellón no ha estimado probado que se cometiera tal robo, puesto que el denunciante no ha acreditado que esa cuantía de dinero y el reloj estuvieran allí.

Y, en caso de que así fuera, estos podían haber sido sustraídos por otras personas, puesto que la casa estaba siendo utilizada por más gente, tal y como reza la sentencia a la que ha tenido acceso este diario. Por todo ello, los acusados han sido absueltos de los delitos, que no han podido demostrarse, y las costas del proceso han sido declaradas de oficio. H