Los padres de la niña de dos años que falleció el 13 de noviembre en el Hospital General, tras ser derivada desde el Comarcal de Vinaròs en estado crítico han presentado ya una querella criminal contra el centro del Baix Maestrat por presunta negligencia.

El abogado de la familia, Rubén Darío, ha informado de que la pequeña ingresó "con un cuadro banal, una simple gastroenteritis, y no presentaba ningún antecedente clínico de interés". El letrado ha anunciado que los progenitores de la menor fallecida se querellan ahora "contra el personal médico y de enfermería de Vinaròs que dispensó asistencia a la menor, como presuntos autores de un delito de homicidio por imprudencia profesional grave, por el que podrían resultar condenados con penas de hasta cuatro años de prisión y seis de inhabilitación profesional".

Los padres aseguran que en modo alguno se les ha facilitado acceso a la historia clínica completa de la menor, ni se han dado explicaciones acerca de que es lo que sucedió.

Del único documento que fue facilitado a los padres de la menor, dicen, se infiere que la causa de la muerte fue un edema cerebral severo como consecuencia de una hiperglucemia severa, causada por la administración de un suero glucosado al 50% de 250 ml, "pero no se han dado explicaciones respecto si fue un error del facultativo al prescribir el suero o del personal de enfermería al administrarlo".

Como avanzó Mediterráneo tras la muerte, la administración por error de una elevada dosis de glucosa en el Hospital Comarcal de Vinaròs causó, supuestamente, las complicaciones médicas que acabaron con la vida de una menor de dos años.