Una embarcación de pesca de arrastre de Peñíscola sufrió en la tarde de ayer un serio contratiempo, al encallar entre las rocas de la escollera cuando estaba a punto de entrar por la bocana con las capturas de la jornada. Los hechos ocurrieron sobre las 16.00 horas, cuando se dio el aviso del choque, que causó una considerable expectación.

A pesar de lo ocurrido, y de la vía de agua originada por los golpes en la estructura, ninguno de los integrantes de la tripulación que iba a bordo del Germans Peris sufrió daños y pudieron salir a los pocos minutos a tierra.

Las primeras maniobras de ayuda consistieron en la extracción del combustible del depósito. Más tarde se inició el trabajo en colaboración entre Salvamento Marítimo, bomberos y gente de otras embarcaciones para sacar el barco (hoy lo remolcarán hasta zona segura) y así poder proceder a la reparación.

Las autoridades serán las encargadas de aclarar las circunstancias que motivaron que la embarcación se desviara hasta alcanzar la parte rocosa del espigón.