Seis hombres se enfrentarán próximamente en la Audiencia de Castellón a 28 años de cárcel (cinco de ellos a cuatro años y un sexto a ocho) como presuntos autores de un delito continuado de robo con fuerza después de protagonizar en poco tiempo hasta cinco asaltos en lugares tan diversos como clínicas de medicina estética, dentales, comercios de electrodomésticos e, incluso, en el despacho de una iglesia de Vila-real.

Uno de los procesados, que responde a las iniciales M.S.B., además, deberá de responder ante la justicia por un delito contra la salud pública, ya que cuando se realizaron los registros domiciliarios por los robos, la Policía Nacional halló en su casa cocaína lista para ser vendida a terceros. Por este hecho, la Fiscalía de Castellón le exige más de 36.000 euros en concepto de multa.

Los hechos se remontan al verano del 2008. Según reza el escrito de acusación del fiscal, tras una larga instrucción desarrollada por el juzgado de Instrucción número 2 de Vila-real, los acusados, el 1 de julio de ese año, forzaron el marco de la puerta de un despacho de esta localidad sustrayendo de su interior material informático, documentación, varios relojes, así como 300 euros en efectivo. Esa misma noche entraron por la ventana de una clínica de medicina estética de Vila-real y sustrajeron un ordenador portátil y 4.200 euros, así como productos de alta cosmética.

Otro día, prosigue la Fiscalía, accedieron al despacho de una parroquia de Vila-real de donde también se apoderaron de material informático. En otra ocasión, accedieron por la fuerza a una clínica dental para obtener material médico y el dinero que contenía la caja fuerte. También lograron entrar, tras cortar el cierre metálico, en una tienda de electrodomésticos de Burriana de donde sustrajeron televisores y teléfonos de alta gama de distintas marcas y modelos.

Tras una ardua investigación los delincuentes fueron detenidos. Nueve años después se sentarán en el banquillo.