Más de 200.000 euros pide la Fiscalía para los familiares de Ana María M., la vecina de Vinaròs de 43 años, que murió acuchillada el 23 de junio del 2015 a manos de su hijo de 20. El joven, cinco días más tarde, y tras intentar mantener oculto el cadáver, le prendió fuego a la habitación donde estaba la fallecida, lo que movilizó a los bomberos, quienes, durante las tareas de extinción de las llamas, descubrieron el cuerpo sin vida.

El acusado, S.B.M., que ahora tiene 22 años y se encuentra en prisión preventiva, se enfrenta a 42 años de cárcel que solicita el Ministerio Público como presunto autor de los delitos de asesinato, en el que concurren las circunstancias de alevosía y de ensañamiento, e incendio.

El próximo viernes, 24 de febrero, el fiscal y los abogados procederán a la elección de los miembros que compondrán el jurado popular encargado del caso. Serán nueve ciudadanos no legos (que no son expertos en leyes) más dos suplentes. La elección se llevará a cabo en la Audiencia de Castellón con una tanda de preguntas a todos los convocados. El lunes, 27, comenzará el juicio con la declaración del acusado.

Los hechos, como relata el fiscal en su escrito de acusación, ocurrieron el 23 de junio del 2015 cuando S.B.M. asestó a su madre, de forma inesperada y sin posibilidad de defensa, más de 30 cuchilladas por todo el cuerpo. El joven, sostiene el fiscal, le seccionó la vena yugular a la víctima, agarrándola por detrás. Tras esto, se ensañó con ella propinándole una treintena de puñaladas, cinco en el tórax, y de las que seis llegaron a ser mortales.

FUERTE OLOR / Ana María M. moría, como después determinó la autopsia, desangrada por shock hemorrágico. El joven, al parecer, ocultó el cadáver en una de las habitaciones de la casa, en la que vivían también sus hermanos. El día 28 de junio, los vecinos llamaron a la Guardia Civil para alertar de un fuerte olor que emanaba de la casa. Los agentes, tras personarse, instaron a sus habitantes a limpiarla. Fue entonces cuando S.B.M., para impedir que se descubriera el crimen, prendió fuego a la habitación, provocando un incendio en la casa de la calle Centelles. Cuando llegaron los bomberos a sofocar las llamas descubrieron el cadáver y la Guardia Civil abrió una investigación que culminó con la detención del joven. Un crimen que causó gran conmoción y revuelo en Vinaròs.