Una mujer de 44 años que practicaba running ayer por la mañana fue atropellada por un coche cuando cruzaba por un paso de peatones de la ronda Norte. Sucedió junto a una rotonda en la que se encuentra una gasolinera-supermercado y muy cerca del colegio Elians, a altura del cauce del río Seco. La víctima sufrió una fractura abierta de tobillo (calificada como catastrófica según los servicios médicos), así como también rotura de tibia y peroné.
La Policía Local de Castellón y una ambulancia intervinieron en el accidente, que se produjo sobre las 9.20 horas. Numerosos conductores que en ese momento circulaban por la circunvalación y fueron testigos del arrollamiento llamaron al 092 para alertar de lo sucedido. Aseguraron que la persona atropellada se encontraba tendida sobre la calzada y hasta el lugar se trasladaron varias patrullas y un SAMU. Los facultativos, tras estabilizarla, la evacuaron rápidamente hasta el Hospital General Universitario.
Según las manifestaciones realizadas por los testigos a los agentes de la unidad de Atestados, el citado siniestro se produjo en el carril izquierdo de la ronda y en sentido al centro de la ciudad.
La mujer atropellada ya había rebasado el carril derecho, donde sí se había detenido un turismo para cederle el paso, y al llegar al siguiente carril, el conductor de otro vehículo no tuvo tiempo de frenar y la golpeó en las piernas.
El hombre que iba al volante de ese coche no presentaba síntomas de estar bajo los efectos del alcohol y, según las explicaciones de los testigos, no circulaba a gran velocidad. El hombre venía de trabajar y se mostró afectado en todo momento por lo ocurrido.
Los agentes municipales cortaron al tráfico los dos carriles de la circunvalación durante aproximadamente media hora, mientras los policías de la unidad de Atestados realizaban las labores de investigación del accidente y actuaban los servicios médicos. Desde el Hospital General informaron en un parte de que la runner herida en el accidente quedó ayer hospitalizada en planta.
QUEJAS DEL COLEGIO
Desde el colegio Elians de Castellón lamentan la «peligrosidad» de la zona e informan a este diario de que el centro tramitó el pasado mes de octubre una solicitud para la instalación de un semáforo o, en su defecto, que haya presencia policial a la entrada y salida de los escolares. «Hasta el día de hoy no hemos obtenido respuesta alguna por parte del Ayuntamiento y el riesgo es evidente, ya que los conductores circulan a gran velocidad por la zona», inciden en declaraciones a Mediterráneo desde Elians British School, que tiene unos 400 alumnos matriculados en el este centro educativo.
