La Guardia Civil de Calpe detuvo a un septuagenario que fue sorprendido mientras robaba dentro de un coche estacionado en las inmediaciones del club náutico de la localidad alicantina y que cuenta con un amplio historial delictivo en España y en el extranjero por hechos similares.

El detenido es de origen marroquí y tenía en vigor una requisitoria judicial con orden de búsqueda, detención y personación en dependencias judiciales.

La investigación comenzó cuando los agentes percibieron un repunte significativo en la comisión de robos dentro de vehículos estacionados en la calle durante los meses de julio y agosto.

Tras las pesquisas, la Benemérita centró sus sospechas en el conductor de un coche que había sido visto en las diferentes zonas en las que se habían perpetrado las sustracciones. Ese turismo resultó ser robado a una empresa de alquiler de vehículos y, además, presentaba unas placas de matrícula que, al investigarlas, eran realmente de coche.

El investigado, pese a su edad y su «desgastada condición física», tenía «un desparpajo y agilidad atípicos», pues, en cuestión de minutos, era capaz de fracturar las ventanillas de varios vehículos, apoderarse de las pertenencias de todos ellos y abandonar el lugar sin levantar sospecha alguna», según la Guardia Civil.

El hombre, que fue sorprendido in fraganti, opuso resistencia y forcejeó con los agentes.