Dos coches aparcados en Benicàssim y un tercero estacionado en el Grao de Castellón fueron incendiados el jueves por la noche, quedando completamente calcinados. Todo indica que las llamas son obra de un pirómano, pues los hechos se repiten después de que hace alrededor de un mes se quemaron cuatro vehículos más en Benicàssim. La Guardia Civil es la encargada de la investigación de estos últimos casos.

En esta ocasión, la primera alarma saltó a las 23.50 horas del jueves, advirtiendo de las llamas en un Opel Astra que estaba aparcado en la calle Vicent Andrés Estellés --en una zona residencial cerca de la avenida Barcelona y de la playa de l’Almadrava--. Exactamente, fue detrás del lavadero y del geriátrico, según explicaron desde la Policía Local.

El siguiente aviso entró a las 00.10 horas --apenas 20 minutos después--, alertando del fuego en un Renault Clio estacionado en la avenida Ferrocarril. Precisamente, en la misma zona donde ardieron otros automóviles hace ahora un mes, concretaron.

Hasta ambos lugares se trasladó la Policía Local, así como los bomberos del Consorcio Provincial. Mientras estaban apagando el primero de los focos, recibieron el aviso del segundo.

Por último, sobre las 00.15 horas se produjo otra llamada al 112, señalando el incendio de otro coche en el Grao de Castellón. Al parecer, fue en la zona de las Tres Banderas, junto a la rotonda de la libélula, según informaron a este periódico. En este caso fueron los bomberos de Castellón quienes actuaron.

ACELERANTES // Estos incendios se suman a los registrados en un párking de los apartamentos San Remo (tres vehículos quemados) y en la calle Alcora, donde ardió otro coche. Aunque la Guardia Civil no lo confirma, esos casos fueron intencionados, pues hallaron una pastilla de prender. Todo apunta a que los últimos, también.