Los servicios sanitarios estaban anoche atendiendo al inspector de Policía que desde mediodía se había atrincherado en un restaurante chino de la localidad madrileña de Alcobendas y que finalmente se pegó un tiro con su propia arma reglamentaria.

Fuentes de la investigación señalaron que el inspector, destinado en la sección de Condecoraciones de la División de Formación de la Policía Nacional, hizo uso de su arma, tal y como había amenazado.

El inspector acudió en torno a mediodía al restaurante chino solo, comió y estaba aparentemente tranquilo, según el testimonio de los empleados del establecimiento.

El hombre amenazaba con suicidarse y los negociadores de la Policía no pudieron hacerle desistir y entrar en el establecimiento, dado que el inspector portaba un arma y llegó incluso a disparar al aire a lo largo de las más de diez horas en que permaneció atrincherado en el local.

Según fuentes de la investigación, al parecer el inspector había ingerido una importante cantidad de alcohol. Los dos empleados del restaurante no vieron si llevaba un arma y, a instancias del policía, tuvieron que abandonar el local, donde no había más personas. H