El Tribunal Supremo no ha admitido el recurso de casación presentado por dos traficantes que fueron condenados hace un año por la Audiencia Provincial de Castellón y ha confirmado la pena de seis años y medio y siete y medio por traficar con cocaína.

La Guardia Civil los sorprendió en el 2016 con dos kilos de droga ocultos en el salpicadero del coche en el que viajaban. Los agentes les dieron el alto durante un control rutinario en la A-7, en la salida 278 (la Vall d’Uixó-Xilxes).

Además, el alto tribunal ratifica también la multa millonaria que el órgano provincial dictó. Cada uno de ellos debe abonar 178.383 euros por los hechos.

Durante el juicio, que se celebró en la Ciudad de la Justicia de Castellón, uno de los procesados alegó que había perdido la memoria y que no se acordaba de los delitos de los que se le acusaba. «No me acuerdo ni de lo que comí ayer», aseguraba.

SUS DECLARACIONES / A preguntas del representante del Ministerio Fiscal, el procesado dijo: «Solo recuerdo que me metieron en la cárcel», añadiendo que «nunca» se había dedicado al tráfico de drogas y que toda su vida había sido albañil. Una versión, sin embargo, que no creyeron los magistrados. El tribunal vio «claramente demostrado que los ya condenados llegaron a poseer la droga y a transportarla, siendo su destino final la distribución a terceros».

Por su parte, el segundo acusado sí reconoció los hechos y explicó a los jueces que transportaban la droga por encargo. «Recogimos dos paquetes con la cocaína y debíamos entregarla en un pueblo de Castellón», confesó.

Varios guardias civiles que intervinieron en el registro del turismo, las detenciones y la instrucción de las diligencias, declararon como testigos y peritos en la causa. Relataron que encontraron ocultos dos kilos de droga en la consola central del Renault Megane en el que viajaban los dos procesados el día de autos.

«La memoria de los dos detenidos me pareció entonces que era buena», explicó uno de los efectivos policiales, en relación a la declaración de uno de ellos, que dijo no recordar nada de lo ocurrido. Las costas del recurso interpuesto deberá abonarlas ahora la parte recurrente, según dicta el Tribunal Supremo.