La persiana reventada y a medio levantar y cristales rotos en el aparador. Fueron ayer, de madrugada, las evidencias de un robo fallido en una carnicería de la calle Ros d’Ursinos de Onda, que investiga la Guardia Civil, según explican fuentes de la comandancia de Castellón.

Fue la Policía Local la que se encontró los primeros indicios de «lo que parecía ser una tentativa de robo con fuerza» en el comercio, al ver la puerta metálica doblada hacia afuera y alzada a apenas medio metro del suelo; y la cristalera estaba astillada, con vidrios en la parte interior, signos de haber sido forzados. Ante esto, llamaron al propietario del comercio, que se personó en el establecimiento, como explican fuentes del Ayuntamiento ondense.

El dueño de la carnicería confirmó a la Policía Local que no faltaba nada, que los ladrones, al parecer, no habían conseguido acceder al interior de la tienda. Fuentes de la Guardia Civil confirmaron que la investigación está en marcha ante una tentativa de robo con fuerza, aunque con evidentes destrozos en la infraestructura comercial.