La rotura de la cadena de seguridad provocó la tragedia mortal del ascensor que el miércoles conmocionó Castellón. Como adelantó este diario, un operario falleció aplastado por el elevador del número 84 de la calle Navarra cuando se disponía a cambiar la cabina. Nada pudo hacerse por la víctima, de 35 años, origen alemán y nacionalidad española.

Los bomberos levantaron la estructura para recuperar su cuerpo y el forense solo pudo confirmar el fallecimiento del trabajador. Agentes de la Policía Nacional y la Inspección de Trabajo investigan ahora las precauciones que se tomaron para llevar a cabo los trabajos de renovación del ascensor, en los que participaron el fallecido y otro compañero, empleados de Uemanin Solutions SL, una empresa perteneciente a Ascensores La Plana.

ACUÑAR LA CABINA / Fuentes policiales aseguran que para llevar a cabo un trabajo de esas características es necesaria la colocación de una cadena de seguridad y, además, acuñar adecuadamente la cabina para que los plomos del ascensor no caigan.

En este caso, la cadena se partió y los investigadores se centran ahora en indagar cuál fue la causa y si la empresa tomó todas las precauciones necesarias.

Desde la gerencia de la compañía se mostraron ayer «destrozados» por la tragedia, insistiendo en que se trata «de un fatal accidente laboral» debido a «un cúmulo de circunstancias», tal y como apuntaron en declaraciones a Mediterráneo. La empresa no incidió en las posibles causas de lo ocurrido, aseveró que «están al lado de la familia del trabajador fallecido» y apuntaron que la policía y Trabajo serán los encargados de llegar a las conclusiones.

Los vecinos del bloque seguían ayer en shock por la tragedia que sorprendió a algunos de ellos el miércoles por la tarde, cuando regresaban a sus casas, entre las 16.30 y las 17.00 horas. Los residentes permanecieron, con la cara desencajada, a pie de calle durante más de dos horas, frente al cordón policial mientras se desarrollaba la intervención de los bomberos y la policía. «No podemos creer lo que ha pasado. Es horrible y a una persona tan joven...», lamentaban con los ojos vidriosos. Tampoco daban crédito los gerentes de negocios cercanos. La zona del suceso, en el portal del edificio, permanece precintada. La comunidad está realizando una obra para eliminar algunos escalones y bajar el elevador a cota cero en la entrada. El fallecido, que estaba en el hueco del ascensor, en la planta baja, se disponía a cortar los cables para sustituir la cabina.

La estructura, que estaba en el séptimo piso, se precipitó en cuestión de segundos y aplastó al trabajador. Su compañero, que colaboraba con él, quedó muy afectado por lo ocurrido.