Cuatro vacas que escaparon del corro de Viver en el último día de sus fiestas patronales fueron recuperadas ayer, tras casi dos horas de búsqueda, y conducidas al camión del ganadero para ser exhibidas a posteriori.

Los hechos ocurrieron sobre las 14.30 horas, mientras se desarrollaba la prueba de ganado después de la tradicional entrada. Según explicaron componentes de la comisión de toros, las reses rompieron el candado de la puerta posterior de los toriles, en la calle Julio Orts, dejándola abierta. Por ahí salieron en dirección a la avenida de la Diputación y por la carretera N-234 continuaron hacia la localidad vecina Jérica.

Como los espectáculos taurinos estaban celebrándose en esa primera parte del mediodía, fueron bastantes los aficionados que se sumaron a la persecución de los cuatro animales para que no se perdieran y estuvieran localizados en todo momento.

separación de las reses // Una de las vacas se separó del grupo y se dirigió hacia la estación de Jérica y las tres restantes prosiguieron por la carretera que lleva a la pedanía de Novaliches.

Poco después de las 16.00 horas, utilizando un camión de la ganadería La Espuela, de l’Alcora, a la que pertenecen los animales, el ganadero logró atraer a las vacas, con un manso, a las proximidades de la carretera de Novaliches (CV-212). Lo mismo ocurrió con la cuarta res en la estación de Jérica, retornando todas ellas a Viver que, precisamente, ayer concluyó sus fiestas patronales.

Afortunadamente, todo quedó en un susto y no hubo que registrar desgracias personales.

almenara y tales // Resulta curioso que, en las ultimas semanas, se hayan registrado incidentes muy similares en municipios de la provincia como Almenara y Tales. Además, también hubo otro en Algemesí (Valencia). Todos ellos están siendo investigados, según señaló el director de la Agencia Valenciana de Seguridad, José Mª Ángel Batalla.

En el primer caso, la vaca, que también se escapó de los toriles durante las exhibiciones de las pasadas fiestas, fue atrapada mediante una cuerda, después de que el uso de dardos tranquilizantes no resultara efectivo.

La muerte, a tiros, de los astados que huyeron en Tales y Algemesí hicieron saltar las alarmas, por lo que desde el Consell se están analizando los protocolos a seguir en este tipo de incidentes. En el caso de Tales, y según fuentes consultadas por este diario, los animales habrían roto la puerta del corral y dos vallados. Los ejemplares fueron abatidos por la Guardia Civil a petición del propio ganadero porque «no podía garantizar» la seguridad ciudadana. En Algemesí, el novillo recibió alrededor de 20 disparos de la Policía Local.