Nuevo ataque a la colombicultura en la provincia. Esta vez, en Burriana, donde este fin de semana los ladrones han accedido a las instalaciones de cinco miembros del club Alqueries de Santa Bárbara para apoderarse de un centenar de ejemplares. Fueron las propias víctimas quienes se percataron del robo el domingo por la mañana. Hallaron las ventanas forzadas y los paños rotos, según cuenta el presidente de la entidad, Luis Carda.

«El asalto se produjo pasadas las 20.00 horas del sábado, aunque no sabemos en qué momento exacto de la noche. Usaron la fuerza bruta, destrozando las ventanas para quitar las rejas. No solo se llevaron a los palomos, sino también algunas medicinas e, incluso, un saco de comida», explicó ayer el representante de los colombaires a este diario.

Desde el club afectado creen que los intrusos llegaron hasta las instalaciones a través del cauce del río Millars. «Acaban de arreglarlo justo ahora y tiene toda la pinta de que han venido por allí. Además, encontramos medio saco de comida robado en una acequia», comentó Carda.

Pero este no es el único ataque sufrido por esta misma entidad y es que la semana pasada, según explicó ayer su máximo representante, personas no identificadas ya mataron a dos palomos de uno de los afectados por este último ataque.

«Buscaban pájaros pintados y, como no los encontraron, decidieron matar a dos de los que había», reveló el presidente.

Las víctimas ya han denunciado el robo ante la Guardia Civil y el Seprona se ha hecho cargo de las investigaciones, según confirmaron a este diario desde la asociación. Con frecuencia, quienes se dedican a este tipo de delitos piden rescates tras sustraer a los ejemplares, sabedores del valor económico y sentimental que tienen las aves para sus propietarios. Precisamente, a finales del pasado año la Benemérita desarticuló en la Comunitat una banda especializada en secuestrar palomos de competición.

BANDAS ORGANIZADAS /

Los agentes detuvieron en la provincia de Alicante a cinco personas que formaban parte de un grupo criminal especializado en el secuestro de este tipo de ejemplares. La banda pedía rescates por las aves y llegó a robar hasta 81 palomos, valorados en 56.000 euros, según informó el instituto armado en un comunicado.