El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial sentó ayer en el banquillo a José Vicente V.V., vecino de Onda y de 50 años, acusado de raptar a su exnovia (sobre la que tenía una orden de alejamiento por presuntos malos tratos) en Vila-real, retenerla bajo llave durante dos días, golpearla, amenazarla de muerte y agredirla sexualmente. La Fiscalía pide para él una pena de 20 años de cárcel por estos hechos.

La víctima relató durante el juicio que, aunque él tenía prohibida la entrada en Vila-real por orden judicial, se presentó en el municipio y la obligó a subirse a su coche. “Me quedé paralizada y obedecí por miedo. Me llevó hasta Onda por unos caminos rurales y me encerró en su casa. Me pegó puñetazos y me acusó de tener amantes. Estaba como ido...”, aseguró la mujer, de 44 años.

La denunciante explicó a los magistrados que José Vicente V.V., diagnosticado de esquizofrenia simple y trastorno de la personalidad con rasgos antisociales, llegó a decirle durante su cautiverio: “¿Qué hago yo contigo?, ¿te ahorco y digo que te he encontrado muerta? Total, con mi enfermedad ¿qué me van a hacer?”. Asimismo, confirmó que el procesado la había amenazado con darle “40 cuchilladas” si iba a contarlo a la Guardia Civil.

Según la mujer, él quiso mantener relaciones sexuales en dos ocasiones y ella accedió a sus pretensiones porque “tenía un cuchillo debajo de la almohada”.

José Vicente V.V. lo negó todo. Dijo, a preguntas del Ministerio Fiscal, que el quebrantamiento de la orden de alejamiento fue “cosa de los dos”. El hombre sostuvo que se veían a diario “porque queríamos”, pero negó haber secuestrado a la denunciante y haber abusado de ella.

Los hechos tuvieron lugar entre el 4 y el 6 de diciembre del 2015. Tras dos días de presunto encierro, la mujer convenció a su ex para que la llevara a hacer una gestión a casa de su hija. Este accedió y una vez en el domicilio de su familiar, la mujer, con la cara amoratada, le contó lo ocurrido.

Mientras el acusado esperaba a la víctima en una gasolinera, la hija de la mujer pidió ayuda, desesperada, a un policía local que regulaba el tráfico con motivo de un partido de fútbol. El agente se dirigió hacia José Vicente V.V., quien huyó en coche, causando daños a varios vehículos, parados por las retenciones. El hombre se salió de la carretera y quedó inmovilizado en una zanja, en la que fue detenido. H