Una mujer y sus seis hijos, todos menores (el más pequeño tiene 2 años) fueron trasladados anoche al centro de salud de Betxí después de sufrir mareos por la alta concentración de CO2 dentro de su vivienda.

Al cierre de esta edición se daba por hecho su regreso a casa, un piso situado en el número 1 de la calle Federico García Lorca, después de que los bomberos ventilaran el inmueble y comprobaran que los niveles de dióxido de carbono eran los correctos.

También habían vuelto a casa el resto de vecinos de la finca, quienes habían sido evacuados de sus inmuebles como medida preventiva al detectarse el problema, sobre las 20.30 horas. Al parecer, la mujer y los pequeños comenzaron a sufrir mareos y, acertadamente, decidieron salir a la calle y avisar a los vecinos, quienes rápidamente alertaron a la policía y a los bomberos del parque de la Plana Baixa.

La primera medida fue cortar el gas ciudad de la finca en el intento de averiguar el origen de la alta concentración de CO2, mientras los afectados eran trasladados al centro de salud. Tras el análisis de los técnicos, comprobaron que el problema podría deberse a una mala combustión en el termo del agua caliente o en la cocina, pues son los únicos electrodomésticos que funcionan con gas en la vivienda, ya que utilizan radiadores eléctricos para la calefacción del piso. Detectado el origen, se autorizó a la familia al regreso a casa, pero impidiendo utilizar el termo y la cocina. H