Tres hombres, de nacionalidad española y de 22, 40 y 41 años, respectivamente, fueron detenidos por extorsionar y amenazar de muerte a su familia si no abonaba una supuesta deuda contraída tras la compra de droga que la víctima negaba que existiese.

El damnificado, viendo la agresividad con la que le amenazaron el día que entraron en su empresa y temiendo que pudiesen llevar esas amenazas a término, decidió ganar algo de tiempo diciéndoles que sí que iba a pagar, pero que en ese momento carecía de efectivo, emplazando a los autores para que al día siguiente regresasen para cobrar.