Las indicios dejan pocas dudas. Las seis salidas que tuvieron que realizar los bomberos del parque de la Plana Baixa ayer por la tarde para extinguir otros tantos fuegos en fincas abandonadas de distintos municipios de la comarca, serían perfectamente atribuibles al conocido como pirómano de la Plana. Al menos esa es la sospecha que cobra fuerza teniendo en cuenta que todos se produjeron con poco tiempo de diferencia, en localidades cercanas y en circunstancias muy similares
El Consorcio Provincial tuvo que movilizar dos dotaciones de bomberos, otras dos unidades de forestales y un helicóptero con UBF helitransportada, además de un coordinador forestal.
Los municipios afectados en esta ocasión son los habituales, otro de los indicios que apuntan a una misma autoría: Vila-real, Nules --con dos incendios--, Moncofa y la Vall d’Uixó. Los medios aéreos tuvieron que dar apoyo en las dos últimas localidades para controlar con mayor rapidez la expansión de las llamas, que afectaron solo a vegetación.
Prácticamente a la vez, una dotación del mismo parque tuvo que trasladarse hasta Burriana, donde se estaban quemando los cipreses de una valla perimetral en una vivienda. El incendio fue controlado sin problemas, pero los bomberos alertan sobre el problema de tener que destinar otros medios a fuegos intencionados.
