Al final fueron 15 los parlamentarios del grupo socialista que rompieron la disciplina de voto fijada por el comité federal y, lejos de abstenerse, se mantuvieron en el ‘no’ a Mariano Rajoy. Otros 68 compañeros de su grupo, en cambio, acataron las órdenes. En el ‘no’ al líder del PP habría que incluir a Pedro Sánchez, pero el exsecretario general del PSOE no votó porque horas antes había renunciado al escaño.