Empieza a agosto y con él da inicio el mes más importante del año para el sector turístico provincial. Desde hoy hasta el próximo 31, los hoteles, apartamentos y cámpings de la provincia recibirán casi 300.000 clientes, según las primeras previsiones que maneja el sector. En agosto del 2015, que ya se batieron todos los récords, el número de visitantes superó los 290.000 y este año se espera que la buena racha continúe.

Las previsiones son buenas y lo son por varios factores. La reactivación económica en España ha propiciado que las familias vuelvan a salir de vacaciones y destinos como Peñíscola, Benicàssim y Orpesa volverán a colgar el cartel de completo. Pero es que, además, se espera un incremento del turismo internacional, sobre todo, europeo. Los conflictos geopolíticos en Turquía y la inestabilidad en países como Túnez o Egipto favorecen a la costa española y, por extensión, a Castellón.

Lo que también va a influir en el incremento de los extranjeros, sobre todo, británicos, es el aeropuerto. Este va a ser el primer agosto en el que está operativo el aeródromo de Vilanova, que empezó a funcionar a mitad de septiembre del 2015.

Van a llegar más británicos, pero el principal mercado emisor de turistas extranjeros es Francia. En Peñíscola auguran un incremento de clientes galos, como también pronostican un alza, aunque más leve, de turistas procedentes de países de Europa del Este. Alemanes y belgas seguirán estables. H