El Consell ha tramitado en un mes de vigencia del régimen sancionador de medidas contra la propagación del coronavirus un total de 692 denuncias de infracciones en la provincia de Castellón. A nivel autonómico, la administración ha realizado 3.506 sanciones que afectan a 3.257 personas físicas y 249 negocios o establecimientos.

Así lo anunció ayer la consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, al término de la reunión que mantuvo con responsables de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias para evaluar las iniciativas que se han puesto en marcha para frenar la propagación de la pandemia.

Según explicó, la Generalitat recibe al día unas 150 propuestas de sanción impuestas por las policías locales, la Unidad Adscrita, el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil. Del conjunto de denuncias, el 96% son infracciones leves impuestas a personas que no llevaban la mascarilla o lo hacen de manera incorrecta.

Por provincias, la de Valencia concentra el 47% de las sanciones, con 1.600 actas levantadas. Le sigue Alicante con el 32% (1.113) y Castellón con el 21% y 692 denuncias. Este número de sanciones durante este periodo aumentará en los próximos días, ya que la Conselleria las tramita conforme son remitidas por los distintos cuerpos y fuerzas de Seguridad y este proceso aún está abierto.

Para agilizar el procedimiento de los expedientes, la Conselleria ha incorporado a nueve funcionarios (tres por provincia) dedicados en exclusiva a esta tarea. Al respecto, Bravo explicó que el decreto sancionador «tenía un marcado carácter disuasorio y no recaudatorio» y los fondos se destinarán a investigación sanitaria.

Sanciones efectivas / Además, la norma se ha revelado «como un instrumento efectivo para garantizar el cumplimiento de las medidas fijadas por las autoridades sanitarias». De las 3.257 personas sancionadas, 474 han reconocido la infracción y tendrán una rebaja del 40% en el importe de la sanción, según detalló la consellera.

En este sentido, Bravo insistió en que la Generalitat está «haciendo todos los esfuerzos para evitar los nuevos contagios con dispositivos de seguridad» pero, en todo caso, es necesaria «la complicidad de toda la ciudadanía para evitar una transmisión comunitaria y para frenar esos 772 focos activos» registrados en la Comunitat.

Por último, la consellera recalcó que «la seguridad sanitaria es la base de la reactivación y la mejor política económica pasa, precisamente, por fortalecer la seguridad colectiva», concluyó.