La Conselleria de Sanidad entregó ayer a la Fiscalía Anticorrupción un total de 4.713 facturas que considera presuntamente irregulares emitidas por dos empresas, Piaf y Telecso, al Consorcio Hospitalario Provincial de Castellón durante los años 2006 y 2015, y cuyo valor alcanza los 25 millones de euros. El Consell tiene la sospecha de que estas facturas se hayan podido emitir por trabajos sin certeza de que se realizaran y, en otros casos, se pudieron ‘inflar’ los importes. Hay que recordar que la mercantil Piaf está relacionada judicialmente con la ‘trama Gürtel’ por la financiación irregular del PP.