Ser autónomo en Castellón es sinónimo de llevar una bandeja y servir cafés y menús al mediodía. Porque si hay un negocio que funciona en Castellón es el bar. Así ha sido tradicionalmente y, con la crisis, todavía más. Nada menos que en la provincia existen 2.864 profesionales por cuenta propia dedicados a la hostelería, de los que más del 80% regentan bares y cafeterías. Y otro apunte más: casi uno de cada cuatro establecimientos está capitaneado por un emprendedor de origen extranjero, según las últimas estadísticas oficiales que maneja la Cámara de Comercio de Castellón.
El bar es el rey, pero los autónomos no solo viven de la hostelería. El comercio es la actividad más importante, con algo más de 11.000 altas en la provincia. Por secciones, quienes están al frente de una tienda de ropa y calzado son los mayoritarios (1.238) aunque en la lista aparecen también algo más de 500 profesionales dedicados a la venta de pan y bollería y otros 600 que están detrás del mostrador de una frutería o carnicería. Entre el sector comercial y el hostelero suman un tercio de los autónomos.
Frente a los autónomos de toda la vida (en este grupo estarían también colectivos como peluqueros, carpinteros, fontaneros, abogados, arquitectos....) irrumpen con fuerza jóvenes profesionales, expertos en nuevas tecnologías, que han decidido crear sus propio negocio. Creadores de videojuegos, expertos en comunicación y márketing, diseñadores de páginas web ya suman casi 3.500 altas en la provincia. Y subiendo. H
