En una conferencia trufada de datos, el profesor de la Universitat Politècnica de València, Juan Juliá, defendió el nivel de la universidad española y valenciana y que todavía es necesario apostar más por ella --sobre todo en transferencia de conocimiento-- debido a que genera empleo de calidad, algo que España necesita.

Juliá argumentó que en España tienen «poco peso las actividades basadas en el conocimiento» y que la inversión en innovación se ha reducido durante la crisis (un 30% por parte del Estado y han caído un 11% las empresas innovadoras, afirmó). Tanto es así que tres compañías, «Bayer, Siemens y Volkswagen, gastan más que España en I+D+i», indicó.

Dado que «no se ha hecho una apuesta por el conocimiento», en el Estado español «tenemos baja competividad». Hasta el punto de que el país «está perdiendo talento». Como muestra apuntó que el 7,8% de los titulados universitarios del 2009/2010 «en el 2014 trabajaban en el extranjero, en países como Reino Unido, Alemania o los Estados Unidos». Esto dificulta la salida de la crisis.

Y para evitarlo se necesita una mayor cantidad de emprendedores, que son mayoritariamente licenciados universitarios y quienes apuestan por la innovación. Aquí es donde está «el talón de Aquiles de la universidad», ya que, a pesar de considerar que el sistema universitario español es «bueno, no de Champions pero sí de Primera División» (tiene 40 universidades, el 80%, entre las 1.000 primeras del mundo, y entre ellas están las 5 valencianas), el «bajo nivel de transferencia y la escasa internacionalización» (aquí hizo un guiño a la UJI, la segunda mejor de España en este nivel) originan la precariedad.

Y es que «emprender nos interesa porque genera empleo» (el 87% del total entre 1987 y el 2010 lo crearon empresas de menos de 3 trabajadores, dijo). Por eso, «necesitamos una nueva economía, con valores, basada en el conocimiento y más plural», es decir, que exista la colaboración público-privada. «Las economías más desarrolladas son las que tienen más cultura emprendedora» --afirmó-- y, para lograrlo, «el ecosistema universitario es una oportunidad para la innovación y el emprendimiento de calidad, basado en el conocimiento». H