Este 2017, el Parc Científic, Tecnològic i Empresarial de la Universitat Jaume I celebra su décimo aniversario y lo hace inmerso en un proceso de redefinición. El 1 de enero el Espaitec pasó a depender directamente de la Fundación general de la UJI, como también lo hace «el resto de parques universitarios públicos» de la Comunitat, señala su director académico, David Cabedo. Y esto, además del cambio en su dirección (hasta esa fecha el responsable era Paco Negre, director desde su fundación) ha motivado también una reorientación.

Aunque continuará «promoviendo la transferencia de conocimiento y tecnología desde la Universitat hasta el tejido empresarial provincial» y «canalizando iniciativas emprendedoras de la comunidad universitaria», se va a profundizar en el trabajo con otras instancias universitarias y se va a tratar de incentivar «iniciativas innovadoras que den respuesta a las necesidades de la sociedad», señala Cabedo.

Es decir, va a tratar de fomentar proyectos innovadores y tecnológicos que además tengan una raíz social, de forma que identifiquen y den respuesta a los diferentes problemas sociales.

Todo tras diez años en los que el Espaitec «ha hecho muchas cosas positivas», destaca Cabedo. Son muchas las iniciativas de éxito gestadas bajo su paraguas desde que en el 2007 nació «con dos proyectos», recuerda Paco Negre. Desde entonces ha respaldado a unas 120 propuestas de negocio y ha impulsado diferentes vías de colaboración con las empresas castellonenses.

Actualmente alberga «una veintena» de empresas y está vinculado a «otras 20, de Castellón y también de fuera», apunta su director de Gestión, Juan Antonio Bertolín. Las compañías instaladas en su sede dan trabajo «a unas 160 personas» y facturan «entre 5 y 6 millones de euros».