El presidente Javier Moliner, defendió ayer el papel de la Diputación «como aliada de la innovación y el crecimiento de la provincia», y se reafirmó en «la importancia de las administraciones» para generar «estabilidad y confianza», para poder atraer inversiones. «Castellón e innovación no solo riman, sino que conjugan», y recordó que la I+D está «en el ADN de los castellonenses». H