«Solo saldremos unidos». El axioma que tanto se popularizó durante el confinamiento parece haberse diluido en medio de la vorágine informativa que genera la pandemia. La crispación y la confrontación política recuperan su trono en el centro del debate público. Frente al abismo de un horizonte impredecible a la altura del inédito contexto, sin embargo, tres de cada cuatro valencianos juzga necesario que los partidos superen la división en torno a asuntos clave y lleguen a grandes pactos para tratar de resolver lo grandes problemas que atenazan a la sociedad. Una conclusión relevante en un territorio tradicionalmente polarizado que se extrae de la encuesta de Invest Group para los diarios de Prensa Ibérica en la Comunitat Valenciana: Levante-EMV, Información y Mediterráneo.

El dato anterior coincide casi al milímetro con el porcentaje de personas que ofrecen una valoración negativa sobre la situación económica. Un 75% de la población valenciana califica de malo o muy malo el panorama económico en el territorio autonómico. Hace un año, cuando la palabra crisis solo era una reminiscencia de tiempos pretéritos, a la misma pregunta respondieron con la misma pregunta un 59,5 % de los encuestados. Una diferencia de 15,5 puntos en solo 365 días.

Aún más se ha hundido la confianza de los valencianos en la marcha de la economía española: solo un 4,5% la califica de buena o muy buena, frente a un 89,7% que la describe de forma pésima. El indicador se ha desplomado 26,3 puntos respecto a octubre de 2019.

La percepción de la situación política en la Comunitat Valenciana también se ha deteriorado sensiblemente, influida por el clima de inestabilidad. Seis de cada diez personas (un 59,6%) tienen una imagen muy negra, cuando hace un año la proporción negativa se reducía al 48,5%. Además, el porcentaje de quienes dan un aprobado a la situación política ha bajado ocho puntos. Mucho peor es la opinión que se tiene en la Comunitat Valenciana del clima político a nivel español: un 84,4% se muestra fatalista al respecto y solo un 8,4% lo valora como bueno o muy bueno.

Todas estas conclusiones del barómetro entroncan de alguna manera con la llamada mayoritaria a articular grandes consensos en cuestiones troncales. Un guante que el Gobierno valenciano recogió con el impulso de los pactos de reconstrucción, que concitaron el apoyo de los grandes partidos del arco parlamentario -salvo Vox-, de los sindicatos, de las organizaciones empresariales y de todas las instituciones valencianas, bajo gobiernos de distintos signo.

Tanto el president de la Generalitat, Ximo Puig, como el del Gobierno, Pedro Sánchez han pedido acuerdos transversales que se trasladen a los presupuestos, aunque esa apuesta genera fricciones entre los socios de gobierno y discrepancias sobre la forma de articularla entre la oposición.

DISCREPANCIAS POR EDAD

El sondeo de Invest Group reduce al 21,5 % el porcentaje de valencianos que cuestionan los grandes pactos entre fuerzas políticas como una vía efectiva para resolver los retos del presente. Quienes más los apoyan se sitúan en las franjas de edad más jóvenes (de 18 a 24 años) y en las más avanzadas (mayores de 64 años), con porcentajes que se sitúan entre el 79,4 % y el 79,5 %. Por provincias, los castellonenses son los más favorables (80%) a los pactos, seguidos de los valencianos (74,7 %) y los alicantinos (70,9%)

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La peor opinión sobre la situación económica valenciana se da en València (el 79,7 % la tacha de mala o muy mala), con una diferencia de seis puntos respecto a Alicante (73,9 %) y de más de diez respecto a Castelló (69%). Aunque la valoración es similar en todos los grupos de edad, los más pesimistas son los que tienen entre 18 y 34 años.

Pese al torbelllino, la apreciación sobre la situación política española es mejor ahora que hace un año, cuando el hartazgo por la acumulación de citas electorales y el clima de permanente inestabilidad derivado de la falta de Gobierno disparó al 86,6 % las opiniones negativas, dos puntos por encima del dato de este otoño.

En este caso, los menores de 35 años son ligeramente más optimistas sobre el escenario político (un 77% lo ve mal o muy mal). En cambio, más del 90 % de los que tienen entre 35 y 49 años califican de forma negativa la situación política en España.

Restringiendo el foco a la C. Valenciana, la percepción de la situación política se ha deteriorado respecto a 2019 pero no supera el récord de mala calificación de 2016, cuando un 66% de los encuestados la observaban como pésima. La opinión es más negra entre los encuestados mayores de 65 años, los comprendidos entre 35 y 49 años y los residentes en la provincia de Castelló. Menores de 35 y los vecinos de València, en cambio, son menos críticos con el panorama político valenciano.