Son los ciudadanos de a pie, la sociedad civil, la que sostiene en la provincia de Castellón el uso del valenciano, apoyados fundamentalmente por la gran implantación de las líneas en este idioma en los centros educativos, mientras echan de menos, y mucho, escuchar más el valencià en boca de los políticos y representantes de la administración o en la radio y la televisión autonómicos. Es el resumen de los últimos datos sobre el sentir de la calle, que cabe reseñar en un día como el de hoy en el que se celebra la Festa per la llengua en el Pinar de Castellón, un acto que cumple, además, 25 años de vida.
Desde la organización, el vicepresidente de Escola Valenciana en Castellón, Natxo Badenes, explica que la conmemoración “nos coge este año en plena negociación del modelo de trilingüismo que propone la Conselleria de Educación y también de los recortes presupuestarios, y queremos recoger el sentimiento de todos los centros docentes y reivindicar cuestiones pendientes como la aprobación de las nuevas líneas en valenciano que han sido solicitadas hace tiempo”.
A pesar de las dificultades y según la última encuesta del uso de la lengua emitida por la Conselleria de Cultura, Castellón ha logrado mantenerse en los últimos años como uno de los territorios de la Comunitat más fieles a su lengua ya que, entre 2004 y 2010, solo ha perdido siete puntos de hablantes, del 87 al 80%, frente a una media del 61% en la región.
Y la situación no ha variado en el último año, a tenor de las apreciaciones tanto de Badenes, como del nuevo presidente de la Secció de Foment de l’Us del Valencà de la Academia Valenciana de la Lengua (AVL), Honorat Ros.
Ros puntualiza, no obstante, que “en los momentos de crisis hay que atender aquello que puede estar más en crisis todavía e impulsar a los ciudadanos de Castellón para que sean fieles a vivir en valenciano”. En este sentido, el académico anuncia que la AVL, la Conselleria de Cultura y más de 60 ayuntamientos de la Comunitat tienen previsto reunirse en breve para suscribir un protocolo de actuación conjunta, precisamente para promover acciones conjuntas y coordinadas de promoción del uso.
llamamiento // A la hora de calificar el uso que la clase política hace de la lengua, Honorat Ros explica que “la única valoración que tenemos es la de los ciudadanos que sitúan a los políticos como los menos valorados en el la utilización de la lengua”. En cuanto a su opinión, es muy claro y afirma que “es evidente que tienen que ser ejemplares y cumplir las leyes que se han aprobado en les Corts”. Ros añade que “el fomento no es solo obligación del Consell, sino también de todos los representes que ocupan un escaño en les Corts”. Por su parte, Natxo Badenes, coincide en que “la Administración incumple la ley de uso que ella misma ha aprobado” y “es difícil ver a un político nuestro, de cualquier partido hablar en valenciano”. H
