La tragedia, ha vuelto a poner en la palestra a los ciclistas, uno de los colectivos más vulnerables en la carretera. El domingo, en el término de Altura, un deportista que realizaba una de las rutas más frecuentadas por los amantes de la bici y también por los apasionados de la motos --la que discurre entre la CV-25, la CV-245 y la CV-35, con salida y meta en Valencia-- moría tras impactar de manera frontal contra un motorista. En una curva, en un tramo montañoso, sinuoso, peligroso.

Justamente, una hora antes otro ciclista, en la CV-25, a apenas un kilómetro de distancia, sufría una grave caída y resultaba con un traumatismo craneoencefálico. Y a apenas media hora del lugar, la Guardia Civil de Tráfico de Castelllón tenía desplegado un control de bicicletas y motocicletas en plena campaña siguiendo las directrices de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Todos los fines de semana la provincia de Castellón acoge salidas de ciclistas y competiciones deportivas de todo tipo. Los amantes de la bicis buscan siempre la montaña y, sobre todo, salen los domingos. La consecuencia es que el número de ciclistas heridos por accidente ha aumentado en los últimos cuatro años en un 20%, según los datos facilitados a Mediterráneo por la DGT.

En el 2011 un total de 81 aficionados sufrió lesiones en Castellón y en el 2015 la cifra alcanzó los 101 heridos. El 95% de percances en bicicleta se sucedieron en carreteras secundarias del interior. En lo que llevamos del 2016 ya van 35 siniestros de este tipo con un balance de cinco heridos graves y tres personas muertas.

MORTAL // En el accidente mortal del domingo, en Altura, confluyeron numerosas circunstancias. El ciclista descendía y el motorista ascendía, ambos a gran velocidad. Los dos trataron de recortar la curva, de atajar con rectas. Los dos se confiaron. El resultado fue terrible y el impacto mortal.

Tal y como explicaba el capitán jefe del subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Castellón, Jesús Charneco, “los ciclistas son uno de los colectivos más vulnerables porque su chasis son ellos mismos, su propio cuerpo”. “Nuestro trabajo, siempre, es la prevención, protegerlos e insistir en que se cumplan las normas de circulación, que son para todos. Hacemos un gran esfuerzo para que el resto de conductores sean prudentes y respeten, por ejemplo, la distancia de seguridad en los adelantamientos y, si es necesario, que rebasen la línea continua para no llevarse por delante al ciclista. Esto es un aspecto que mucha gente desconoce, pero que la ley sí que contempla”.

Y continuó: “La Guardia Civil, siguiendo la directrices de la DGT, lleva a cabo campañas de prevención con controles utilizando vehículos camuflados y también helicópteros. Además, insistimos en que los ciclistas cumplan con las normas de seguridad pasiva y se protejan con casco, que usen chalecos reflectantes --en condiciones de baja visibilidad--, que circulen lo más próximos posible al borde de la calzada, en paralelo... Nuestro objetivo es evitar cada día que ocurran desgracias en las carreteras y garantizar, además, la seguridad de todos los conductores”. Respecto al tipo de accidente más común en Castellón, Charneco explicó que “son las caídas, vuelcos en calzada o salidas de vía que, normalmente, suceden por descensos a una alta velocidad o por distracciones”.

LOS DOMINGOS // El capitán jefe puntualizó que los domingos por la mañana es cuando más casos se dan: “Todos los fines de semana tenemos algún accidente con ciclistas implicados. Normalmente se producen después de almorzar, cuando ya han hecho el esfuerzo y están más cansados o más relajados”. Y apuntó que la lesión más frecuente es el traumatismo craneal. Y concluyó: “Aquí existe una gran afición al ciclismo, donde tenemos la Vuelta a Castellón, en breve, y la Vuelta a España, que son dos grandes acontecimientos. Dos pruebas a las que, desde la Guardia Civil, prestamos muchísima atención con un gran despliegue”. H