«Por favor, hazme caso. Sé consciente del peligro. En un segundo tu vida puede cambiar para siempre. Llevar un coche no es un juego. No bebas, no corras... No cambies de ruedas». Vicente Segarra, un vecino de Xilxes y miembro de la Asociación de Lesionados Medulares y Grandes Discapacitados Físicos (Aspaym), se quedó parapléjico hace casi 30 años, tras sufrir un grave accidente de tráfico en el que su vehículo dio varias vueltas de campana: «Cuando me sacaron del coche me partí en dos. No esperaron a la llegada de la ambulancia. En ese momento me quería morir... Mi vida dio un cambio radical y me quedé postrado en esta maldita silla de ruedas. Cada día, cada minuto, recuerdo el accidente. Yo no me abroché el cinturón».

Su drama sirvió ayer para concienciar en primera persona al resto de conductores. «Muchas veces no sabes la magnitud de las cosas hasta que suceden. Hasta que te pasa. Hasta que lo ves», insistió. Así, acompañó a la Guardia Civil en el inicio de la campaña de la operación salida y habló con conductores que los agentes paraban para realizarles las pruebas de alcohol y drogas en la salida sur de la AP-7, en Castellón. «He venido para apoyar a la Guardia Civil en esta importante labor que realizan en pro de la sociedad», manifestó emocionado.

«Gracias, te haré caso»

La mayoría de conductores agradecieron a Vicente sus consejos y todos finalizaban sus charlas con un «gracias, te haré caso». Un turista italiano, Nicolás, fue claro: «Lo sé, yo también sufrí un grave accidente y no sé aún cómo salí vivo. Desde entonces paro a descansar cada cierto tiempo, no bebo y no excedo la velocidad».

Vicente, que estuvo acompañado en todo momento por el subdelegado del Gobierno, David Barelles, y por el jefe de Tráfico, Victor Sales, aprovechó para entregar a los conductores unos folletos informativos con un mensaje claro: «Nada de alcohol, respeta los límites de velocidad, mantén la distancia de seguridad, ponte el cinturón, cuida tu coche, respeta a los ciclistas, descansa y sé prudente. Vive».