Los ayuntamientos siguen teniendo problemas a la hora de ampliar plantilla y eso que la convocatoria de oposiciones para cubrir vacantes de jubilación parece que ha abandonado el dique seco. Tras años con prácticamente cero convocatorias, algunos ayuntamientos de Castellón han anunciado concursos públicos para el 2017. Muchos municipios, como Vila-real, lo harán tras 6 años de parón absoluto. De hecho, el ayuntamiento ya ha anunciado que el próximo año contratará a cuatro o cinco personas para que cubran los puestos que se han quedado vacantes en el 2016. No se trata de la convocatoria de nuevas plazas de funcionarios (algo que prohibe la ley), sino de cubrir las que ya existen, pero que se han quedado vacías por jubilación.

Vila-real incorporará cinco funcionarios y, Castellón, 17. Se trata de una cifra que los responsables del Ayuntamiento de Castellón consideran «insuficiente», ya que la normativa solo les permite cubrir algunas vacantes por jubilación, y no todas.

Pese a que poco a poco las oposiciones van reactivándose, en la provincia las cifras continúan a años luz de las registradas antes de la crisis. Un ejemplo: en el 2008 la Administración local ofertó en Castellón 378 plazas. En el 2016, y según un informe de CCOO, tan solo fueron 29. El sindicato también ha reivindicado el fin de los rectores y que el Gobierno permita a los ayuntamientos incrementar plantillas.

Los ayuntamientos apenas anuncian plazas y la Administración autonómica va un poco más lanzada. Este año la Conselleria de Educación ha cubierto más de 1.200 puestos en la Comunitat, aunque para el 2017 ya ha dicho que no tiene previsto nuevas convocatorias docentes. Será en el 2018 y 2019 cuando el departamento que dirige Vicent Marzà tiene pensado cubrir un mínimo de 5.000 plazas.

En Sanidad, la Conselleria está publicando (empezó en octubre y acabará antes del verano), el calendario de las 3.608 plazas de la Oferta Pública de Empleo (OPE) de los años 2014, 2015 y 2016, que se han agrupado por distintas especialidades.