La positiva evolución del desempleo en la provincia de Castellón en el último año --con un descenso de 937 personas en julio, según los datos del Sepe publicados ayer por este diario-- es una realidad que no alcanza a los parados que tienen más de 45 años, que suman ahora 21.800, según la Encuesta de Población Activa (EPA). Es decir, 700 más que 12 meses antes, en una tendencia contraria a la del conjunto de desempleados, que son 52.400 frente a los 67.900 de junio del 2015.

Del número de 21.800, que incluye a personas con nombres y apellidos y, a menudo, con cargas familiares, el 63% --más de seis de cada 10-- supera los dos años de búsqueda, pero sin encontrar un trabajo, atrapados en una situación en la que, por su duración, ya no perciben ningún ingreso.

larga duración // Son alrededor de 13.730 ciudadanos quienes ya no tienen derecho a recibir la prestación por desempleo y han agotado también los subsidios sociales, según la proyección de los datos autonómicos de la EPA sobre las cifras castellonenses.

En cuanto a los que no han logrado ningún trabajo en el último año dentro de esta franja de edad, suman alrededor de 4.700 y suponen el 21,6% del total de los parados que superan los 46 años en Castellón, mientras que entre 12 y 24 meses de búsqueda infructuosa se sitúan en unos 2.500 ciudadanos, alrededor del 11,5% del total. Apenas 800 parados del colectivo, el 3,7%, son los que han logrado encontrar empleo.

causas y soluciones // A la espera de conocer el detalle de las medidas específicas del plan de empleo autonómico anunciado por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, los sindicatos castellonenses reclaman acciones que incidan especialmente en los parados de más de 45 años.

El secretario general de UGT en Castellón, Paco Sacacia, apunta entre las razones para este estancamiento del colectivo en las listas del paro el hecho de que buena parte de sus miembros comenzó a trabajar “muy pronto”, al calor de la época de bonanza previa al 2008, y lo hizo “sin formación académica”. Por tanto, apunta, “están cualificados desde la práctica, pero nada más, y eso hace mucho más complicado que accedan a un trabajo en un momento como este, que hay poco empleo y sí muchas personas muy cualificadas”, destaca.

Sacacia, que pone también el acento en que “casi todos tienen cargas familiares”, señala que “hacen falta incentivos al empleo estable para todos, pero especialmente para este grupo de edad, que lo tiene más difícil, penalizando, además, los contratos temporales no justificados”.

Por su parte, Manel Nieto, secretario general de CCOO en Castellón, añade que “se trata de personas que han trabajado muchos años en sectores de mano de obra intensiva y con poca o nula formación, que se han convertido en las primeras víctimas de los ERE producto de la crisis y de las reformas laborales”. Con estas premisas, Manel Nieto indica que, como primera medida, reclaman “que se aplique la ley de la renta mínima, sobre todo para este colectivo, que en el Estado se compone de dos millones”.

más mujeres // Alerta, además, sobre la feminización del paro en todos los segmentos de edad y entre quienes tienen 46 y más años también. “Los hombres están muy afectados por los despidos en los últimos años, pero hay más mujeres que hombres en este tramo de edad, en el que parece que estás prácticamente desahuciado para la vida laboral”, apunta Nieto, quien recuerda el hándicap de que “la concepción social es que el trabajo fuera de casa es sobre todo para el hombre”. H