Desde la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat (Aerte) su presidente, José María Toro, pide un marco adecuado de financiación de los servicios contemplados en el sistema de atención a la dependencia de forma que el Estado aporte el 50% que le corresponde y, además, que la Generalitat abone a tiempo las facturas, algo que actualmente no se produce. En la actualidad el 80% de las aportaciones de la dependencia las paga la autonomía y el 20% el Estado.
«Es necesario que los compromisos económicos se paguen cuando toca para poder mantener el sistema», apuntó Toro.
La patronal considera que «faltan muchísimas plazas de atención a personas mayores, con discapacidad, de salud mental...», sean residenciales, de centros de día o de ayuda a domicilio. Sin embargo, sin una buena colaboración público privada no se podrá dar respuesta, por lo que anima al sector privado «para que acompañe a la iniciativa pública y llegue donde esta no llega».
Sistema 'low cost'
Para Aerte, se prioriza un tipo de ayudas que algunos califican low cost: «El 68,12% de las prestaciones resueltas desde julio de 2015 han ido a parar al cuidador no profesional, lo que sitúa a la Comunitat como la primera de España en este tipo de recurso». La Conselleria, rebaja al 54% el porcentaje en el último mes.
Aerte pide que la atención sea realizada por profesionales bien a domicilio, en centros de día, pisos tutelados o en residencias, para no sobrecargar a las familias y evitar el impacto de género ya que en la actualidad el 90% de los cuidadores son mujeres.
