El coronavirus detectado en China ya alcanza a Italia, lo que obliga a redoblar la precaución en nuestras fronteras. La confirmación de seis fallecidos como consecuencia del covid-19 causa impacto en un país con el que hay una fuerte relación económica desde Castellón. Solo hay que comprobar las estadísticas de comercio exterior, que aúpan al país transalpino como principal fuente de las importaciones hacia la provincia, por un valor total de 554,8 millones de euros en el pasado año, mientras ocupa el cuarto lugar en el ránking de exportaciones, tras Francia, el Reino Unido y los Estados Unidos, con una cifra de 554 millones.

A diferencia del gigante asiático, con el que no existen rutas directas desde PortCastelló, sí existe un elevado volumen de negocio con Italia por vía marítima. Desde la autoridad portuaria detallaron que en el pasado año «el movimiento de mercancías de importación fue de 316.419 toneladas, sobre el total de algo más de 21 millones». Las materias principales fueron biodiésel, caolín, sulfato, feldespato y materiales para la construcción.

En cambio, el grueso de las exportaciones desde la provincia tienen que ver con el sector de la cerámica, con pavimentos y revestimientos, fritas y esmaltes o productos químicos. En los primeros puestos de la lista se hallan también los cítricos.

EMPRESAS / Una muestra de la continua interacción económica es la presencia de filiales de industrias de origen italiano en Castellón. Son en buena parte compañías dedicadas a la comercialización de productos para el clúster azulejero y suministradoras de maquinaria. Las fuentes consultadas por Mediterráneo detallan que por el momento las actividades se desarrollaron con total normalidad en el primer día hábil desde que se dieron a conocer los primeros casos, en la tarde del pasado viernes.

Desde la compañía Colorobbia, con sede en Vilafamés, mencionaron que el tráfico de mercancías no registra incidencias, aunque algunos contactos de clientes y personal entre ambos países ha sido aplazado, a falta de conocer la evolución de este brote. «Vamos a sustituir la relación cara a cara por medios telemáticos o videoconferencias» en esos casos, detallaron.

Desde otra empresa, Sicer, indicaron que en su caso «no solemos hacer viajes entre España e Italia con mucha frecuencia, así que el ritmo de trabajo se ha desarrollado con normalidad». Existen protocolos establecidos para estas situaciones en PortCastelló, sin aplicarse de momento, si bien al menos una consignataria que opera en el interior ha recomendado el uso de mascarillas como medida preventiva.

Mientras se sigue la evolución de los casos italianos, parte de la economía provincial está también pendiente de lo que ocurra en China, que es proveedor de materias primas para productos tan importantes para el sector cerámico como los esmaltes. Las empresas cuentan con estoc suficiente, aunque en las últimas semanas han disminuido los viajes, debido a la cuarentena que limita el paso de personas.