La Universitat Jaume I prepara un presupuesto para el próximo ejercicio basado, por encima de cualquier otro criterio, en la necesidad de mantener la «prudencia» y el «equilibrio» ante la incertidumbre relativa al capítulo de los ingresos. Así lo confirmaron a Mediterráneo varias personas que asistieron al Consell Social de la UJI, en el que se debatieron entre otras cuestiones algunos de los proyectos que la institución tiene pendientes, pero que no son posibles a corto plazo por la caída de la aportación del Consell.

Estas mismas fuentes señalaron que en la reunión no se dieron cifras concretas sobre las cuentas del 2018, y que simplemente se trazaron algunas «líneas maestras» atendiendo a las proyecciones que se pueden realizar a día de hoy. Y es que «faltan muchos datos para que se pueda hacer una previsión clara, especialmente la partida procedente del Consell», que apuntan que aún no se ha concretado.

Entre los capítulos de gastos que se incrementarán en el 2018 figuran, entre otros, el de personal y la inversión necesaria para iniciar el traslado a la UJI del Colegio de Enfermería del Hospital General, que ahora depende de la Universitat de València.

MEMORIA // El consejo de gobierno de la UJI también aprobó ayer la memoria del curso académico 2016/2017 de la Escuela de Doctorado, que ofreció 317 plazas para estudiantes de nuevo ingreso distribuidas entre 19 programas de doctorado, 12 propios y siete interuniversitarios.