El president de la Generalitat, Ximo Puig, anunció ayer una primera acción concreta de la Agenda Valenciana Antidespoblación (Avant) orientada hacia la creación de empleo en las zonas de riesgo de Castellón y del resto de la Comunitat a través de un refuerzo en la respuesta de emergencias. Puig suma así con Avant a la Generalitat a las políticas desarrolladas por la Diputación de Castellón para fijar la población en zonas de riesgo del interior.

El líder del Consell explicó que el plan busca garantizar, con una inversión de 12 millones de euros y en 214 pueblos del territorio autonómico, la respuesta y la «acción inmediata» ante las emergencias en las comarcas de la región que están afectadas por el «invierno demográfico».

La medida prevé la creación de diferentes unidades de prevención de riesgos, integradas cada una por cuatro personas, que se constituirán con el trabajo conjunto entre el Servef y la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta ante las Emergencias.

Ximo Puig, quien presidió la reunión de la Comisión Interdepartamental para la Lucha contra la Despoblación de los Municipios Valencianos, cuyos trabajos se enmarcan en la Avant, celebrada en Castellón, indicó que los trabajos que realicen estas unidades deberán tener como objetivo principal «la reducción de los riesgos poblacionales derivados de los incendios forestales, a través de distintas acciones que favorezcan la intervención de los medios de extinción, coordinados por Emergencias».

Una «prioridad»

El president recordó que, para el Gobierno valenciano, la lucha contra la despoblación representa una de sus prioridades, puesto que «se trata de un problema que genera una situación de desequilibro territorial que perjudica al conjunto de la Comunitat Valenciana».

Con el acento en la transversalidad de la agenda antidespoblamiento, así como en la idea de que hay cosas que ya «se están haciendo», Puig aseveró que desde el Consell van a «combatir esta situación para garantizar que todo el territorio esté bien desarrollado y habitado por ciudadanos en igualdad de condiciones».

Recordó que, para lograr este objetivo, es necesario fomentar la creación de empleo en estas zonas, así como la prestación de unos servicios públicos de calidad. Añadió que Castellón no es la provincia con el mayor índice de despoblación de la Comunitat, pero sí la que cuenta con una intensa fractura entre las condiciones de vida de quienes habitan en la franja litoral, que acumula la mayor población, y el conjunto del territorio del interior.

En este sentido, hizo referencia a otros de los temas tratados en la comisión, como la creación de un programa para reflotar la enseñanza en las zonas rurales, que ya está en marcha y tiene entre otras líneas de actuación claras, que «no se cerrará ningún colegio» en el ámbito rural.

El encuentro contó, entre otros cargos, con la participación de los consellers de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà; de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent; y de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián.