La industria cerámica castellonense crecerá este año con cifras muy similares a las obtenidas en el 2016, según el balance provisional ofrecido ayer por Ascer. Así, el azulejo cerrará 2017 con un volumen de ventas aproximado de 3.520 millones de euros, lo que representa entre un 7 u 8% más que los registros del ejercicio precedente y supondrá el quinto año consecutivo de crecimiento tras superar los peores años de la crisis. Pese a este incremento, los números ya reflejan una cierta desaceleración, motivada principalmente por la inestabilidad de algunos mercados.

Los máximos responsables de Ascer, encabezados por su presidente, Isidro Zarzoso, realizaron ayer un balance del sector y lo hicieron repasando «las luces y sombras de este 2017», además de mostrar un «moderado optimismo» cara al próximo año.

El vicepresidente de la patronal, Juan Francisco Ramos, manifestó el buen tono conseguido en el mercado europeo, y los buenos números conseguidos en Estados Unidos, con incrementos del 24%. Mientras Italia, México y Rusia han crecido, «la cruz de esta moneda» se la han llevado los países africanos del arco mediterráneo, especialmente Argelia, Túnez y Egipto, con fuertes caídas, y cuyas previsiones para 2018 no dan pie para ser muy optimistas, dijo.

MERCADO NACIONAL Y PRECIOS // En cuanto al mercado nacional, el comportamiento sigue siendo positivo, pero en clara desaceleración, según Ramos. Respecto al precio del metro cuadrado, el producto nacional, pese a crecer un 1,3%, sigue siendo muy inferior al que ofrecen los competidores más cercanos. Mientras el precio del azulejo español es de 6,59 euros por metro cuadrado, el italiano se sitúa por encima de los 11 euros e incluso el portugués está ya en los diez.

A pesar de estos precios considerados bajos, desde Ascer se estima que el sector ha venido trabajando en los últimos años para lograr avances y reforzar la rentabilidad del producto, según expuso el vicepresidente de la patronal, Vicente Nomdedéu.

Finalmente, Zarzoso señaló los logros de la asociación en cuanto a las investigaciones antidumping, con las renovadas medidas arancelarias sobre los productos chinos y la supresión de las trabas que hacían peligrar el mercado marroquí. El presidente de Ascer reiteró que 2018 será un año muy complicado para el sector por el incremento de la competencia en la esfera internacional.