El sector servicios da empleo a día de hoy exactamente a dos de cada tres castellonenses. El 66% de los ocupados de la provincia trabaja en el conjunto de actividades que componen esta rama económica, la más diversa, según recoge la EPA del segundo semestre. El porcentaje siempre se ha movido en términos similares, y es así aunque este sector ha perdido 6.300 ocupados respecto al año anterior y solo los ha aumentado en 1.900 respecto a marzo, a pesar de que el verano es la época estrella para estas actividades.

De esta manera, 140.500 personas trabajan a día de hoy en la rama de servicios, muy marcada por el comercio y la hostelería, pero también por otras actividades. La cifra es muy superior a la del resto de sectores. La industria es la siguiente ocupación mayoritaria, con 49.900 empleados y un porcentaje del 23,5%. Le siguen, ya mucho más lejos, la construcción (12.200 ocupados, el 5,7% del total) y la agricultura (9.900 trabajadores, el 4.7%).

Esta dependencia del sector servicios es un lastre para la economía provincial, según han criticado siempre la patronal castellonense CEC y los sindicatos mayoritarios. Unos y otros demandan desde hace años un impulso a la industria de Castellón, dado su poder de creación de empleo estable y el vinculado. H