La del ministro de Fomento fue una de las primeras -y más esperadas- intervenciones en el cónclave, debido a la cantidad de frentes que tiene abiertos con Castellón el departamento que gestiona. Íñigo de la Serna repasó ante la militancia provincial los compromisos adquiridos en materia de infraestructuras, si bien aportó pocas novedades respecto a los anuncios efectuados en las últimas semanas. Destacó que la figura de Miguel Barrachina, portavoz del grupo popular en la comisión de Fomento del Congreso de los Diputados, supone una garantía de cumplimiento. «La voz de Castellón está con nosotros, y ha estado dale que dale con el Puerto de Querol o la A-7», dijo.

En cuanto al corredor mediterráneo, indicó que el tramo Castellón-Vandellós «lo pondremos en servicio antes de lo esperado», cuyo proyecto está previsto finalizar antes de fin del 2017, para iniciar posteriormente las obras

Sobre las pruebas del AVE, «estamos en manos de la Agencia de Seguridad Ferroviaria», por lo que «no podemos recortar un solo día a este organismo para dar satisfacción a ningún grupo político, somos los primeros interesados, pero la seguridad es lo primero en lo que debemos velar».

De la Serna agradeció la labor de Javier Moliner, quien «ha hecho las cosas bien, y este congreso es un ejemplo» y vaticinó que su sucesor «también lo hará extraordinariamente bien». «Expresamos nuestros compromisos con honradez, seguimos trabajando por Castellón, con unidad, lealtad y un presidente que estará encima de los temas», dijo.