Los empresarios turísticos de Castellón tienen claro que este recién estrenado mes se cerrará como el mejor de la historia, título que hasta ahora ostenta agosto del 2016. Justo hace un año la provincia contabilizó 316.022 turistas y 1.719.646 pernoctaciones, sumando la ocupación de plazas en hoteles, cámpings, apartamentos y casas rurales.

El buen ritmo de las prerreservas, la vuelta a la época dorada del consumo de vacaciones de los españoles y los multitudinarios eventos --como los festivales costeros del Arenal Sound y Rototom; o la fiesta del Anunci en Morella, unida a las tradicionales de agosto en los pueblos-- elevan al máximo las previsiones del sector. La Diputación de Castellón, de hecho, prevé una ocupación de más del 92% en el litoral.

Precisamente, los enclaves costeros de Castellón son los que más disparan su población habitual en verano, y especialmente, en agosto, sumando turismo y segunda residencia, donde en esta campaña se hará especial hincapié en los alquileres irregulares.

Representantes de distintos municipios confirmaron a Mediterráneo que hacen encaje de bolillos con la gestión de los servicios públicos, para atender a residentes y visitantes, que disparan el censo por unos meses, o incluso días, como durante los festivales. Desde Peñíscola, el edil de Turismo, Rafael Suescun, explicó que pasan de los 7.500 empadronados --con picos de 20.000 residentes en invierno-- a los más de 100.000 habitantes en verano, «llegando a 150.000 en las semanas centrales de agosto».

BASURAS Y TRÁFICO

La renovación de contratos justo este ejercicio en Peñíscola ha implicado la mejora de servicios este estío: desde más personal y horas de limpieza en las playas, a la ampliación de la recogida de residuos a áreas urbanizadas donde no se llegaba. «El refuerzo de la Policía Local es imprescindible para atender el tráfico, pues también se multiplica el parque móvil. Y la atención sanitaria se refuerza con consultorios», manifestó el concejal peñiscolano.

En puntos próximos, como Alcossebre, pasan de 8.000 a 85.000 habitantes. Y en Burriana, con 34.643 censados, recibirán hasta 300.000 más durante los días del Arenal Sound. Además, los poblados marítimos burrianenses (serratella, Puerto, Grao y Santa Bárbara), con unos 4.000 residentes habituales, en agosto alcanzan los 12.000, según el consistorio.

En el caso de Benicàssim, la edila del área, Elena Llobell, explicó que pueden sumar en campaña estival por el turismo más de 80.000 habitantes: de los 19.000 habituales a 100.000 o incluso en picos de festivales, los 177.000 habitantes en la localidad. En meses punta de ocupación como agosto la limpieza aseos públicos en festivales, por ejemplo, pasa de tres a cinco veces. El refuerzo abarca desde brigadas como policía local e informadores turísticos. Se echa mano de subvenciones de empleo para contratar a parados, que adecentan la playa. «Son 7 kilómetros de litoral para tener a punto todos los días. Realmente, el personal se amplía pero también triplica su esfuerzo para dar la máxima atención», indicó.

En la misma línea, en Moncofa, el alcalde Wenceslao Alós compartió que en su municipio pasan de 6.300 vecinos a 40.000, «con picos de afluencia en fiestas de Sant Roc, en la segunda quincena de agosto. Se junta población, turistas y visitantes». «Nos toca realizar un esfuerzo y se refuerza la policía, playas y el servicio de contenedores», dijo.