El mercado inmobiliario en el litoral castellonense comienza a consolidar su crecimiento al cumplirse una década desde que estallara la burbuja en el sector de la construcción. Los últimos datos refrendan una aún leve recuperación del mercado de las compraventas de viviendas, especialmente en el litoral, con casi 600 contratos cerrados en el que ha sido el mejor junio desde el 2008 o los veinte apartamentos que se han vendido de media cada día desde el pasado mes de enero, con incrementos en las transacciones del 7% respecto al mismo periodo del año anterior y cuyos registros son ya similares a los que se dieron hace 5 años.

Con estos números Castellón, lastrada aún por un abultado estoc de viviendas per cápita solo comparable a las que se dan en las provincias de Almería o Toledo, se sitúa como uno de los territorios más activos en lo que concierne a la recuperación del sector inmobiliario, por la tendencia alcista de las transacciones.

La provincia registró en el primer semestre de este año un total de 3.258 ventas de viviendas, tal como señala en último informe el Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que representa un incremento del 4,4% con respecto al mismo periodo del 2016. Sin embargo, las estadísticas destacan, sobre todo, el incremento experimentado por las compras de inmuebles de segunda mano, especialmente en las ciudades más próximas al litoral, que acapararon el 86% de las transacciones del mercado inmobiliario castellonense y que han visto incrementado su volumen en casi el 7% en solo un año.

AÑOS DE REFERENCIA

Por lo que se refiere a los pisos nuevos, la recuperación está siendo algo más lenta ya que por cada vivienda recién construida se venden casi nueve inmuebles ya usados. Al respecto, el reciente informe sobre transmisiones de derechos de propiedad del INE señala que a lo largo del pasado mes de junio solo se cerraron 70 contratos de compraventa de viviendas nuevas, lo que constituye solo el 13,5% del total. Este comportamiento, sin embargo, dista bastante de los datos referidos a los pisos de segunda mano, que ya en este mes de referencia han conseguido igualarse a los que se daban al final de la primera mitad del 2008; la compraventa de pisos usados, por su parte, aún se tienen que remontar a los registros que se dieron a mediados del 2011, año especialmente difícil para el sector, según los últimos datos estadísticos.

Por otra parte, de las 589 viviendas transferidas a lo largo del pasado mes de junio en la provincia de Castellón, los inmuebles bajo el sello de protección oficial apenas representaron el 5,7% del parque inmobiliario, según las mismas fuentes.

Para el sector, los últimos datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística vienen a señalar, pese al aún leve incremento de las transacciones, la recuperación del sector y la proyección para los próximos meses tras haber tocado suelo en el periodo que abarca los años 2010 y 2012, con meses en los que las cifras de ventas apenas rebasaron, en alguna ocasión, las 300 unidades, según se refleja en el balance del INE.

EVOLUCIÓN DESDE 2014

Desde esta fecha hasta el 2014, el sector experimentó ligeros altibajos y, partir de este último año, el alza en el número de operaciones comenzó una tendencia alcista que ha llegado a consolidarse en el último semestre, con una creciente reducción del estoc de viviendas.

En lo que concierne al resto de la Comunitat, en la que la compraventa de vivienda subió un 6,6% durante el pasado mes de junio, Castellón se volvió a situar de manera porcentual como la provincia con mayor dinamismo, con valores del 7%, aunque lejos de la media nacional, que fue del 9,7%. En cuanto a la naturaleza de las compraventas realizadas en este mismo periodo, el 86% correspondieron a fincas urbanas y el 13% a rústicas. En el caso de las fincas urbanas, casi el 58% de las transacciones correspondieron a viviendas.