Investigadores de la Universidad de Duke han comprobado luego de un extenso estudio que los machos babuinos con fuertes lazos sociales, principalmente con integrantes del sexo opuesto, viven más tiempo en comparación con aquellos que se aíslan. Según una nota de prensa, condiciones similares ya se habían constatado en los seres humanos, en los caballos y en los delfines, entre otras especies.

La investigación de los especialistas estadounidenses recoge 35 años de datos obtenidos de más de 540 babuinos salvajes localizados en Kenia. A lo largo de ese período, los científicos analizaron el comportamiento de machos, hembras y grupos de primates con integrantes de distintas edades, obteniendo como conclusión que los lazos sociales impactan directamente en la longevidad.

Se sabe que las personas que están más integradas socialmente viven más tiempo. En la última década, esta condición humana se ha podido comprobar también en especies como los caballos o los delfines, dejando en claro que los patrones que relacionan a la interacción social con un incremento de la longevidad parecen comunes a casi todas las formas de vida.

Estudios en machos

Sin embargo, existía hasta el momento un inconveniente de peso para poder comprobar esta tendencia en los machos primates no humanos: los mismos habitualmente abandonan los grupos sociales, como sucede en la mayoría de los mamíferos, dificultando su estudio a largo plazo en cuanto a las relaciones con su entorno directo.

Esto explica también por qué la mayoría de los estudios se han realizado sobre la base de observaciones de las hembras de distintas especies. Sin embargo, esta nueva investigación ha logrado superar este escollo, obteniendo resultados similares en los machos primates a los que se han observado en los hombres.

Utilizando técnicas estadísticas que permitieron inferir el riesgo de mortalidad en cada edad a partir de datos escasos, los expertos analizaron la relación existente entre la supervivencia y la amistad. Siguiendo a los babuinos casi a diario desde comienzos de la década de 1970, este ambicioso proyecto logró determinar sus relaciones sociales y deducir el impacto de las mismas sobre la duración de sus vidas.

El ritual de la amistad

Un dato importante es que la amistad entre babuinos machos y hembras se concreta a través del acicalamiento. Entre los machos no se acicalan, buscan hembras para hacerlo y construir así fuertes lazos sociales que exceden las necesidades de apareamiento y reproducción.

El ?ritual? implica sentarse juntos y hurgarse el pelaje, buscando parásitos a eliminar. Más allá del aspecto de la limpieza, con esta práctica los babuinos alivian su estrés y se relacionan con el sexo opuesto. Los resultados en cuanto a longevidad son concretos: los machos que mantienen fuertes amistades con las hembras cuentan con un 28% más de probabilidades de sobrevivir un año más que los ejemplares socialmente aislados.

Aunque los investigadores creen que todavía es necesario seguir profundizando en la relación entre amistad y longevidad, sostienen que su trabajo sobre el comportamiento social del babuino indica que el poder de los lazos sociales puede tener profundas implicancias en las raíces evolutivas de los primates y otras especies.

Referencia

Social Bonds, Social Status, and Survival in Wild Baboons: A Tale of Two Sexes. Fernando A. Campos, Francisco Villavicencio, Elizabeth A. Archie, Fernando Colchero, Susan C. Alberts. Philosophical Transactions of the Royal Society B (2020).DOI:https://doi.org/10.1098/rstb.2019.0621

Foto de portada:

Acicalarse es la forma en la que un macho babuino se une a sus semejantes y crea lazos sociales con el sexo opuesto. Imagen: Susan Alberts, Universidad de Duke.