La oferta turística de Nules nunca ha tenido que ver con la de los destinos masificados y más populares. De hecho, ese siempre ha sido uno de sus atractivos principales, la familiaridad y la tranquilidad que ofrece escoger la localidad para disfrutar de uno o varios días de descanso. En el momento actual, más que nunca, esa singularidad se convierte en un valor añadido a tener en cuenta.

En un mes de agosto sin fiestas y con una agenda de actividades a nivel general bastante reducida en comparación con la de otros años, Nules reivindica un amplio catálogo de atractivos que conjugan el casi indispensable sol y playa de estas fechas, con entornos naturales dignos de conocer y una riqueza patrimonial como principal bandera.

OCIO SEGURO

La preocupación del Ayuntamiento por asegurar a vecinos y visitantes un entorno con los riesgos sanitarios reducidos al mínimo, llevó a mantener una serie de contactos con los responsables de los locales de ocio del municipio que ha supuesto la creación del distintito Nules, ocio seguro. Porque en estos días de sol y calor, lo que más apetece es disfrutar del aire libre, de la compañía de los familias y amigos, pero con seguridad. Quienes estos días se acerquen tanto al pueblo como a la playa, podrán identificar el mencionado distintivo que garantiza, entre otras cuestiones, que el personal porta mascarilla durante toda su jornada laboral, que está generalizado el uso del gel hidroalcohólico entre los clientes, que se respetan las distancias de seguridad y que las instalaciones son desinfectados siguiendo los protocolos establecidos para evitar contagios. Los locales que han firmado ese compromiso han sido B&B, Baccus y Bonki Beach, en la playa, y La Bodeguita de Macorina, en el casco urbano.

Pero entre las oportunidades estivales que ofrece Nules y que la distinguen de la mayoría de los municipios turísticos de la provincia, está su playa. De cantos rodados, esta zona del litoral, que por segundo año consecutivo ha merecido la distinción de Bandera Azul en Les Marines, aporta a la calidad de sus aguas la seguridad que supone no ser una costa masificada. Tanto es así que resulta complicado llegar a Nules con ganas de mar y no poder disfrutarlo por los aforos.

Y ese baño de agua y sol tiene un complemento perfecto con el decorado que supone el casco histórico marítimo, constituido por las conocidas como Les casetes de primera línea, un paisaje urbano, que como ha llegado a defender la prestigiosa Fundación Goerlich, tiene unos valores etnológicos y arquitectónicos que se conservan intactos en muy pocos puntos del territorio valenciano, razón por la cual, vecinos y Ayuntamiento se han unido en el empeño de protegerlos. Y la mejor manera de hacerlo, es dándolo a conocer, de ahí que entre las recomendaciones de la Oficina de Turismo local esté la indispensable visita a esta primera línea de playa.

ACTOS ALTERNATIVOS

Aunque la crisis sanitaria ha afectado a la amplia programación de actividades turísticas y festivas propias del verano, entidades y asociaciones locales, con el respaldo del Ayuntamiento, se resisten a dejar pasar las vacaciones sin realizar actividades que levanten el ánimo, con todas las medidas de distanciamiento y seguridad indispensables. Así se celebró el viernes pasado la ya tradicional Festa del Farolet, aunque en una versión distinta, adaptaba a las nuevas circunstancias; del mismo modo que, coincidiendo con la celebración de la Mare de Déu d’Agost, la Banda Artística Nulense organizó ayer un pasacalle musical por la playa, desde el faro hasta el paraje natural de l’Estany.