Torreblanca se ha convertido en un destino más atractivo, si cabe, este año. Y lo es gracias a su litoral poco masificado, de ambiente familiar y con todos los servicios de una gran playa, lo que lo ha posicionado como un pueblo de referencia este verano. En la localidad no solo se puede disfrutar del sol y la arena, ya que hay multitud de actividades gratuitas al aire libre organizadas por el Ayuntamiento para que los visitantes y los vecinos disfruten de la mejor forma los meses de verano.
La playa alberga los lunes y miércoles por la mañana clases de pilates, una actividad muy demandada y con aforo de 30 personas. Los martes es el día de la cultura, a través de visitas guiadas. Cada semana cambia el tema, entre los que destacan el patrimonio o el arte urbano, disciplina que, a través del festival Cítric, ha llenado las calles de coloridos grafitis que merecen ser contemplados.
CINE PARA TODA LA FAMILIA
Los miércoles es especial porque por la noche el consistorio brinda cine en la playa, con un aforo de 250 personas con distanciamiento, midiendo la temperatura al entrar y siguiendo todas las medidas de prevención contra el coronavirus. La actividad, desde que comenzó, está siendo todo un éxito.
El jueves se realizan clases de yoga en la arena de la playa, también para un máximo de treinta usuarios. Por su parte, los viernes se celebran sesiones de una hora por la mañana para hacer estiramentos en la arena.
Y los fines de semana es el turno de las actividades en el Parc Natural del Prat Torreblanca-Cabanes, con excursiones para conocer la flora y la fauna; talleres divulgativos sobre tortugas, anfibios, aves o murciélagos; o excursiones que hacen las delicias de los más pequeños de la casa.
Con todo ello, Torreblanca es este año, más que nunca, un destino atractivo y seguro donde disfrutar de su privilegiado entorno, su playa, su gastronomía y su gente.
