El XXXVIII Aplec dels Ports de Villores se cerró ayer de forma exitosa, con un acto de clausura que reunió a un buen número de participantes. Fue un momento emocionante en el que se homenajeó a las personas que han hecho posible la celebración y se dio el testigo del evento a la Mata, localidad que confirmó su intención de organizar esta cita.

La organización y el Ayuntamiento de Villores valoraron de forma “muy positiva” el Aplec, que fue de nuevo un punto de unión de la comarca. Estiman que se han cumplido las expectativas, con la presencia de unas 10.000 personas durante el acontecimiento, con alta ocupación en el espacio de acampada, en especial, la zona para familias. Además, ha habido gran movimiento de visitantes en la localidad.

La comisión también agradeció el trabajo de los 165 voluntarios de todas las edades que hicieron posible el evento. Los vecinos se volcaron en los diferentes aspectos logísticos y en las tareas necesarias para que una localidad tan pequeña como Villores, en la que hay censadas menos de 40 personas, pudiera albergar este encuentro comarcal.

La jornada del domingo fue más tranquila que las dos anteriores, pero no por ello menos intensa. Los Gaiteros de Morella iniciaron las actividades con una despertà. A mediodía, los actos se trasladaron a la plaza del Ayuntamiento, con una muestra de elaboración de espardenyes y un divertido espectáculo itinerante dedicado a la magia.

Por la tarde, el escenario de la Bassa fue el marco de los últimos actos, con Bratwurst Secrets, Mireia Vives y Borja Penalba, y el punto final musical de Skatuttipresto. La comisión organizadora recibió en el cierre el reconocimiento de los asistentes.

Un equipo que, desde hace cerca de un año, estuvo preparando la fiesta comarcal del fin de semana, intensificando las tareas en las últimas fechas. Todo bajo el lema del Aplec dels Ports del 2016: Per les nostres arrels, ens mullem!

Villores volvió a unir reivindicación y fiesta, dando a conocer los problemas de esta comarca del interior de la provincia. H