El verano es la mejor época para hacer cosas toda la familia junta pero hay veces que el calor o la falta de ideas nos lleva a quedarnos en casa frente al televisor o al ordenador. Te traemos unos planes ideales para hacer durante las vacaciones del colegio de tus hijos.

  1. Con la comida sí se juega. En las horas de más calor, qué mejor que preparar un poco de repostería casera para después de comer o para la merienda. Apuesta por desarrollar la parte más creativa de los pequeños de la casa. Cuando miréis el reloj, las horas habrán pasado muy rápido, el sol habrá caído y todos juntos podréis merendar al aire libre, disfrutando de la naturaleza y de unos productos muy ricos.
  2. Teatro en familia. El verano es un buen momento para aprender cosas nuevas y asistir a sitios hasta el momento desconocidos. El teatro es una actividad lúdicoeducativa que en muchas ocasiones se ve aplazada por diversos motivos (laborales, académicos…). Hay multitud de obras de teatro para todas las edades y para todos los gustos. Apuesta por el teatro en familia, seguro que los más pequeños te lo agradecen y siempre es agradable hacer planes diferentes. Los musicales también son una gran apuesta.
  3. Leer nunca falla. La lectura, un clásico que se puede convertir en una gran aventura. Marcaos un día en la agenda para ir en busca de ese libro que leer por las noches. Todo el proceso de compra para los más pequeños es mejor en ocasiones que el propio libro. Una excursión a una librería, multitud de cuentos entre los que elegir, les obliga a empezar a tomar decisiones y en ocasiones es un proceso costoso al que los progenitores le pueden ayudar. Una vez con el libro en sus manos empieza lo mejor: la lectura todos juntos.
  4. Educa su oído. No todos los planes son para los más pequeños. Disfruta de buena música con los benjamines del hogar. En verano los festivales de música se multiplican y muchos de ellos ya tienen en cuenta a los más pequeños. Solo tienes que apuntar dónde y cuándo toca tu artista favorito y apostar por ello. Seguro que el ambiente les encanta a los niños, las actividades para ellos son geniales y pasarán un día de lo más entretenido. Si lo que te preocupa es que los decibelios dañen sus oídos, en muchos de ellos alquilan tapones súper coloristas para protegerlos. ¡Forma sus gustos musicales desde la cuna!
  5. Arte para los 'peques'. Los museos no tienen por qué ser un aburrimiento. Apuesta por la cultura en familia. Una escapada rural visitando algún museo le aporta valor al viaje y a su vez creas nuevos puntos de interés para los peques.
  6. Ejercita su creatividad. Las manualidades un clásico que entretiene por horas. Potencia la creatividad de tus hijos y ayúdales a mejorar su psicomotricidad. Apuesta por hacerlas al aire libre. La pintura de dedos encanta a todos los públicos, eso sí, de ahí a la ducha toda la familia.
  7. La naturaleza, apuesta segura. Vuélvete un niño, regresa a tu infancia. Haz partícipe a tu hijo de tu rincón favorito en verano. Planea una escapada de un día al lugar donde veraneabas, seguro que si a ti te hacía feliz, a ellos también.