Últimamente todo el mundo habla de ellos, y es que se han convertido en una práctica extendida entre famosos y gente influyente. Pero lo cierto es que no es nada que se haya descubierto hoy, la gimnasia abdominal hipopresiva, conocida coloquialmente como abdominales hipopresivos o simplemente hipopresivos, fue ideada por el fisioterapeuta Macel Caufriez en los años 80. Su propósito era el de encontrar un ejercicio con el que las mujeres después del parto pudiesen recuperar la forma de su abdomen.

Desde entonces, y con alguna que otra variante añadida a través de distintas investigaciones del propio Caufriez y de otros profesionales, la gimnasia abdominal hipopresiva se adapta perfectamente a todo el mundo y se ha convertido en uno de los ejercicios con el que mejores resultados se obtiene si queremos trabajar la zona abdominal. Y es que se trata de uno de los ejercicios abdominales más eficaces, muy por delante de los tradicionales abdominales.

Además de ser muy recomendables para la recuperación post-parto, los principales beneficios de los abdominales hipopresivos son:

  • Evitar la flacidez de la zona abdominal
  • Reducir la presión dentro del abdomen
  • Fortalecer la musculatura del suelo pélvico
  • Ayudar con problemas relacionados con el aparato genito-urinario en las mujeres
  • Corregir la postura y aliviar el dolor de espalda
  • Eliminar problemas estéticos (como por ejemplo la hinchazón)
  • Prevenir el estrés, ya que al ejercer un control de la respiración el cuerpo se relaja (similar a lo que ocurre con el yoga)

Este método hipopresivo se realiza dentro de la cavidad abdominal a través de distintos movimientos y posturas, algo así como una reprogramación de la musculatura, y mediante apneas respiratorias. Su aprendizaje es bastante complejo, es por esto que se recomienda realizarlo bajo la supervisión de un profesional que sepa guiar el entrenamiento y vigilar las posturas, de manera que evitaremos causarnos posibles daños físicos.

A la hora de realizar este tipo de ejercicios, la imagen que primero se viene a la cabeza es la de abdómenes en los que se marcan las costillas, pero los hipopresivos son mucho más que meter tripa. Requieren un trabajo continuo del músculo del recto del abdomen y del control de la respiración. Se recomienda realizar rutinas de 20 a 30 minutos y, si vamos a iniciarnos en esta práctica, deberemos dejar algunos días entre las rutinas e ir aumentando la continuidad según avance el entrenamiento.

Este tipo de gimnasia hipopresiva es recomendable para todo el mundo, excepto para personas hipertensas o embarazadas.

No todo son hipopresivos

La gimnasia abdominal hipopresiva es muy beneficiosa y recomendable, pero es importante complementar estas rutinas con otras prácticas deportivas. Si queremos mantener nuestro cuerpo a punto, es importante trabajar cada músculo de la forma correcta. Es por esto que se recomienda variar los ejercicios. Una buena forma de hacerlo es acudir a centros especializados que cuenten con programas deportivos, como es el caso del Thalasso Hotel El Palasiet, en los que podamos encontrar entrenamientos alternativos a la gimnasia hipopresiva.