Estamos solo a unas horas de empezar con el maratón navideño de cenas, comidas y encuentros familiares o con amigos. De hecho, puede que muchas personas ya llevemos unos cuantos días de excesos entre cenas de empresa y quedadas con amigos. Aunque lo más fácil es dejarse llevar y tratar de no pensar demasiado, lo cierto es que actuar antes de cometer los excesos nos ayudará a recuperarnos mejor o incluso a mantenernos en forma durante las fiestas.

El primer paso es intentar seleccionar alimentos lo más sanos posible. No es del todo incompatible comer muy bien durante estas fiestas con hacerlo de manera saludable: hornear en lugar de freír, evitar comidas muy grasas y salsas muy pesadas nos puede ayudar a digerir mejor y a sentirnos menos pesados. Además, es fundamental intentar compensar las comidas más pesadas con otras mucho más ligeras y ahí es donde las frutas y las verduras asumen el papel protagonista. Si llevamos un par de días de excesos, optar por menús en base a frutas y verduras de temporada nos permitirá equilibrar y ayudar a nuestro cuerpo.

Controlar las cantidades que comemos en esos momentos de fiesta es una de las técnicas para no caer en excesos y, en algunos casos, en arrepentimientos. Con frecuencia tenemos ante nosotros un montón de platos diferentes que nos encantaría probar y es muy importante calcular las cantidades si queremos probarlo todo sin terminar comiendo demasiado. Hacerlo poco a poco y disfrutar de la compañía y de una buena charla con amigos y familiares nos ayudará a comer menos.

El ejercicio suele ser uno de los grandes olvidados durante los periodos festivos: muchos compromisos, comidas pesadas, viajes familiares… Pero ser capaces de mantener una rutina, aunque sea más suave de lo normal, también nos ayudará a sentirnos mejor y a no tener que recuperar una vez pase la Navidad.